Diablos al infierno
Franklin Ingmar
OIGA, amigo, ¿quién cuida de los muertos en esta población? La voz que lanzaba esta pregunta estaba en consonancia con su dueño. Los ojos negros, hundidos en las órbitas del que había hablado, danzaron maliciosamente, mientras se movía en su silla, se acariciaba el mentón y sonreía al hombre encaramado en la cerca. Bajo el fuerte sol del Panhandle, aquel individuo formaba un marcado contraste con su compañero, hombre alto y delgado que permanecía sentado en la silla, guardando un sombrío silencio. El pueblo se llamaba Huntsville.
Рік:
1969
Мова:
spanish
Файл:
AZW3 , 757 KB
IPFS:
,
spanish, 1969